Conferencia sobre el Futuro de Europa: valores y derechos
La pandemia del Covid-19 ha puesto en evidencia la fragilidad de una Europa construida desde unas claves predominantemente de mercado. El papa Francisco en la encíclica Fratelli tutti, en el epígrafe titulado "El fin de la conciencia histórica" ha alertado sobre el peligro de una especie de "deconstruccionismo", basado en un consumismo sin límites y la acentuación de formas de individualismo sin contenido (Fratelli tutti, 13).
En su discurso sobre el Estado de la Unión para 2021 titulado «Reforzar el alma de nuestra Unión», Ursula Von der Leyen se inspira en la frase de Robert Schumann: "Europa necesita un alma, un ideal y voluntad política para alcanzarlo" para explicar en qué ha avanzado Europa y cuáles son los pasos para seguir avanzando. Un discurso en el que sin embargo la palabra participación no aparece ninguna vez, la palabra ciudadanía, aparece una, y la palabra derechos aparece cinco, y en una de ellas "afortunadamente" para afirmar que en Europa no se puede mercadear con los derechos humanos.
Por eso mismo se alienta también una pérdida del sentido de la historia que disgrega todavía más. Se advierte la penetración cultural de una especie de "deconstruccionismo", donde la libertad humana pretende construirlo todo desde cero. Deja en pie únicamente la necesidad de consumir sin límites y la acentuación de muchas formas de individualismo sin contenidos. (FT 13)