Roma firma el "Llamamiento a las Ciudades ICAN"
#ICANSaveRoma. En una decisión rotunda y unánime, el ayuntamiento de Roma ha dado un paso histórico en defensa de la paz y la seguridad mundiales. Al unirse al "Llamamiento a las Ciudades ICAN", Roma suma su voz a una coalición cada vez mayor de casi 100 ciudades italianas, instando al gobierno a firmar y ratificar el Tratado de Prohibición de las Armas Nucleares (TPAN). Este importante paso subraya un cambio fundamental en la política mundial, que da prioridad al legado humanitario de las armas nucleares sobre las estrategias militares abstractas.
La alineación de Roma con otras capitales destacadas como Canberra, París, Berlín, Oslo, Amsterdam, Luxemburgo, Helsinki, Berna y Washington, D.C., demuestra la determinación colectiva de hacer frente a la amenaza existencial que suponen las armas nucleares. Esta decisión refleja los sinceros sentimientos expresados por la concejalía de Roma:
"Creemos firmemente que las personas residentes tienen derecho a vivir en un mundo libre de esta amenaza. Cualquier uso de armas nucleares, ya sea deliberado o accidental, tendría consecuencias catastróficas, de largo alcance y duraderas para las personas y el medio ambiente. Por ello, apoyamos el Tratado de Prohibición de Armas Nucleares y pedimos a nuestros gobiernos que lo firmen y ratifiquen".
En el fondo, la decisión de Roma reconoce que las armas nucleares trascienden las meras herramientas políticas de guerra; representan símbolos de insondable sufrimiento y devastación humanos. El TPAN se erige como un faro de esperanza en un mundo que lidia con el persistente espectro de la aniquilación nuclear. Al condenar inequívocamente el uso y la posesión de armas nucleares, el Tratado reafirma el imperativo moral, político y jurídico de salvaguardar a la humanidad de los horrores de la guerra nuclear.
Lo que distingue la decisión de Roma es su fundamento en una política centrada en las personas. El respaldo del ayuntamiento al "Llamamiento a las Ciudades ICAN" refleja un auténtico compromiso con el bienestar y la seguridad de la ciudadanía, y pone de relieve el profundo impacto del activismo de base y el compromiso de la comunidad en la configuración de las políticas públicas.
Roma quiere que Italia se adhiera al TPAN
Además, la decisión de Roma resuena mucho más allá de los límites de su ciudad. Envía un poderoso mensaje no sólo al gobierno italiano, sino también a los gobiernos nacionales de todo el mundo, instándoles a que presten atención a la voluntad de su electorado y den prioridad a la búsqueda de la paz sobre la búsqueda del poder. La voz colectiva de ciudades como Roma ilumina el camino hacia un futuro más seguro.
La verdadera seguridad no puede lograrse mediante la amenaza de la destrucción mutua asegurada, sino mediante la búsqueda de la humanidad común y la prosperidad compartida. La decisión de Roma de unirse al "Llamamiento a las Ciudades ICAN" nos recuerda que una política enraizada en el derecho internacional, promovida por el pueblo y basada en la responsabilidad directa hacia la humanidad puede dar resultados transformadores. Es hora de que el gobierno italiano siga su ejemplo y se una al TPAN.