Lo esperado: Israel rompe la tregua

Sabíamos que, más pronto que tarde, Israel rompería la tregua. Pero no imaginábamos que pudiera ser así, con una andanada de bombardeos masivos sobre edificios residenciales, escuelas e instalaciones públicas de Gaza (ciudad de Gaza, Deir al-Balah, Khan Younis, Rafah…), que han dejado, según las últimas cifras, al menos 404 muertos y más de 560 heridos, la mayoría de ellos niños.

En enero pasado, Israel y Hamás acordaron un alto el fuego, en tres fases: En la primera (seis semanas), Hamás liberaría a 33 rehenes, e Israel unos 2.000 prisioneros palestinos; cesarían los combates y las fuerzas israelíes se retirarían del norte de Gaza; los palestinos desplazados comenzarían a regresar a sus hogares y entraría de nuevo a la Franja ayuda humanitaria (unos 600 camiones diarios con alimentos, medicinas, suministros, combustible…).

En la segunda etapa, también de seis semanas, serían liberados el resto de rehenes israelíes a cambio de un número aún por negociar de presos palestinos. En la tercera, el ejército israelí se retiraría por completo de Gaza, se implementaría un plan de reconstrucción y se abrirían los cruces fronterizos en la Franja; ambas partes intercambiarían los cadáveres de combatientes y prisioneros fallecidos.

Los detalles de la segunda y tercera fase comenzarían a concretarse a los 15 días de iniciarse la primera (es decir, a partir del 3 de febrero), donde también se negociaría un alto el fuego permanente y la definición sobre quién gobernaría Gaza tras la retirada del ejército israelí, así como los acuerdos necesarios de seguridad y reconstrucción.

La primera fase cumplió los objetivos previstos en cuanto a liberación de rehenes y prisioneros.
El 2 de marzo, debería haber comenzado de la segunda fase, que implicaría la liberación de prisioneros y la retirada completa de Israel de la Franja. Pero Israel se negó a negociar la concreción de la segunda y tercera fase. En ese período, el presidente estadounidense anunció su "plan" para Gaza: Desplazar a los palestinos de ella y hacer allí una "Riviera de Oriente Medio". Israel y Estados Unidos propusieron prorrogar la primera fase 50 días más, durante los cuales Hamás tendrían que dejar en libertad la mitad de los 59 rehenes que aún están en Gaza (entre ellos probablemente cinco estadounidenses), sin nada a cambio. Trump amenazó una vez más con el "infierno" si Hamás se negaba.

Hamas calificó de "inaceptable" la propuesta, que significaba una especie de rediseño de la tregua, con condiciones totalmente nuevas, que apuntaban a olvidarse de la retirada de las tropas israelíes de Gaza y aplazar sine díe el fin de la guerra. Hamás buscaba negociar un fin permanente a la guerra y la retirada total de las fuerzas israelíes de Gaza, de acuerdo con los términos del alto el fuego de enero. Y dejó claro que la liberación de nuevos rehenes estaba condicionada a la salida del ejército israelí de Gaza, tal como se había acordado en enero.

Recientemente se habían reanudado en Catar, bajo la mediación de ese país y Egipto, las negociaciones entre Israel y Hamás, pero la delegación israelí exigía la liberación de un gran número de rehenes y la prórroga de la primera fase".

Israel ha justificado el reinicio de los bombardeos precisamente en la negativa de Hamás a liberar a los rehenes que siguen en su poder y a que rechazara las propuestas de Estados Unidos de extender la primera fase.

Cabe señalar que, desde que el 19 de enero entró en vigor la tregua, el ejército israelí ha matado a más de 150 gazatíes y herido a 490. Según Hamás, Israel ha cometido 962 violaciones al alto el fuego, incluidos 219 vuelos de reconocimiento, 77 incidentes de disparos, 45 incursiones de vehículos blindados y 37 bombardeos.
Además, el gobierno israelí había cerrado la entrada de ayuda humanitaria a Gaza (agua, comida, combustible y medicinas, suministros…) y cortó el suministro de energía eléctrica a la Franja.

Todo indica que a los bombardeos de la madrugada del 18 de marzo seguirán incursiones militares terrestres. El ejército israelí ha ordenado la evacuación de los palestinos que residen en los límites de la Franja.
Los analistas, y muchos ciudadanos israelíes, se preguntan ahora qué ocurrirá con los rehenes que permanecen en Gaza.

Por si había alguna duda, Estados Unidos confirmó que Israel le consultó antes de reiniciar los bombardeos. Y ha amenazado, según su costumbre, con desatar "el infierno" contra "todos aquellos que buscan aterrorizar a Israel y a Estados Unidos".

Waldo Fernandez, colaborador