La guerra nos cuesta un mundo. Desarme ya para salvar a las personas y al planeta
Los Días de Acción Global para la Reducción Gasto Militar (GDAMS), que este año tienen lugar entre el 12 de abril y el 15 de mayo, urgen a destapar los vínculos entre militarismo, guerras, emergencias globales (sobre todo climática) y gastos militares. Este periodo especial de acciones es parte de la campaña GCOMS (Campaña de Acción Global sobre el Gasto Militar) del International Peace Bureau (IPB) que coordina el Centre Delàs d'Estudis per la Pau y que tiene por objetivo demandar grandes reducciones del gasto militar mundial y la redirección de estos fondos públicos a atender las verdaderas necesidades humanas. Este año el lema propuesto: «La guerra nos cuesta un mundo. Desarme ya para salvar a las personas y al planeta» hace un llamamiento que quiere apuntar al alto coste de oportunidad que representa el enorme gasto militar,
Nota
El mundo se encuentra en una encrucijada geopolítica, incluso
cuando nos alejamos del periodo post-Guerra Fría para adentrarnos en una
nueva era de multipolaridad y, sin embargo, resulta inquietante que los
líderes mundiales aumenten su dependencia de las soluciones
militarizadas.
Ahora, el gasto militar se pregona como una necesidad para
mantener todos los aspectos de la seguridad. Al mismo tiempo, ha surgido
una gran red de intereses a escala mundial, liderada por muy pocos
actores privados supranacionales que controlan empresas e influyen en
los gobiernos de forma puramente antidemocrática. Se trata de una red de
poder global que incluye y conecta empresas militares y de energías
fósiles, y en la cual la militarización no sólo causa la muerte de
cientos de miles de personas, sino que también se convierte en
responsable instrumental del desastre medioambiental al proteger los
intereses de los combustibles fósiles y los actores depredadores. Esta
red trabaja, directa e indirectamente, para impedir medidas que podrían
aliviar tanto la crisis medioambiental planetaria como el sufrimiento de
millones de personas, y no se amilana ante los beneficios de la venta
de armas a actores genocidas, como vemos en el apoyo militar prestado a
Israel para que continúe sus incesantes ataques contra Gaza. Es
necesario por tanto reafirmar el poder democrático en todo el planeta.
El gasto militar no solo alimenta guerras y conflictos armados en
todo el mundo, sino que también detrae recursos que podrían dedicarse a
abordar el cambio climático, invertir en justicia global (incluidos los
Objetivos de Desarrollo Sostenible de la ONU) y promover la
transformación pacífica de conflictos y el desarme. Los ejércitos se
encuentran entre los mayores consumidores de combustible del mundo,
representando el 5,5% de las emisiones globales, mientras que el uso de
productos químicos contamina la tierra alrededor de las bases militares,
envenenándola durante generaciones. El uso continuado de minas y
municiones de racimo, así como de armamento convencional, deja la tierra
inhabitable durante generaciones.
El coste de oportunidad de mantener un gasto militar así, nos está costando, literalmente, un mundo.
Los GDAMS de 2024 incluyen:
- 15 de abril: Día de Impuestos en los Estados Unidos
- 22 de abril: Publicación de nuevos datos sobre el gasto militar por SIPRI (cifras de 2023) + Día de la Tierra
- 9 de mayo: Día de la Paz en Europa
- 14 y 15 de mayo: Cumbre C7, organizada por la Sociedad Civil para enfrentar al G7
A medida que presenciamos las consecuencias globales de la militarización, se vuelve urgente protestar contra los presupuestos militares en todo el mundo. ¿Te unirás a nosotros?
Puedes adherirte aquí al llamamiento como organización, entidad o colectivo.
Para saber más sobre los
Días de Acción Global para la Reducción Gasto Militar y consultar todas
las acciones celebradas y previstas por parte de organizaciones y
movimientos sociales de todo el mundo en el marco de los GDAMS, consulta Aquí.